Licencia para la Locura

Hoy estaba levantándome a duras penas en la mañana y mientras me tomaba el usual baño matutino me imaginé, simplemente para divertirme un buen rato, qué pasaría si tuviesemos una licencia para volvernos locos.. algo temporal.

Que un día pudieses ir a una de estas oficinas burocráticas y, después de hacer larga cola y unas cuantas "amistades", entrases a hablar con una señora lenta y un poco malhumorada que terminaría llevándote hasta un salón donde te toman una foto (en la que no pareces tú) y dándonte un carnet... pequeño, sencillo... nada especial.. sino fuese por el hecho de que por un día (caduca al día siguiente) tienes permiso total y completo de volverte loco...

Imagínate .. saltando en el medio de una avenida mientras gritas lo más fuerte que te permite tu garganta, bailando descalzo en el escritorio de tu jefe, volteando los platos de tu mesa para comer debajo de ella, queriendo comprar en el super con los billetes del juego monopolio... Y que, aún haciendo locuras a diestra y siniestra nadie te reprochara con la mirada, los gestos o una que otra charla bastante emocional.

¿qué harías entonces? ¿qué sentirías? ¿conseguirías una licencia entonces? y si así fuese.. ¿te sentirías realmente libre o no?